El duelo

El duelo es un proceso difícil por el que tenemos que pasar todos. La muerte, como todo lo negativo de esta vida, es constantemente negada y mucha gente muestra verdadera preocupación por ella. El miedo a que pasará después o a la forma de morir, la sola idea de tener que vivir sin la persona que queremos, el emitir juicios de valor tipo "es bueno o malo, es justo o injusto" y la falsa creencia de que no nos va a pasar o que todavía no, son algunos de los motivos por los que este trance se hace realmente difícil. La aceptación de que la muerte es parte natural de la vida, que nos puede pasar en cualquier momento a cualquier edad, que hay un límite hasta donde podemos llegar y hacer porque no depende de nosotros y que la persona a la que tanto queremos hoy puede dejar de estar son una parte complicada que la gran mayoría de la gente cuando llega este momento no está preparada para afrontar. Hablar de la muerte sin tapujos, conocer las voluntades de las personas como si fuera a pasar mañana normaliza todo este proceso. Si vemos la muerte como parte del proceso, nos despedimos y acompañamos a la persona en su camino iluminándoselo (con esto quiero decir haciéndoselo más liviano), la recuperación y la pérdida se hace más llevadera. No hay una pastilla que te quite el dolor, es un proceso por el que hay que pasar de la mejor forma posible centrándonos en aquellos que están y en hacer en vida lo que no se puede hacer cuando uno ya se va. Duele mucho decir adiós, duele dejar partir, duele cerrar ese capítulo.